Si tiene un hijo que sufre de asma, puede que le resulte difícil “exhalar” y relajarse. Quizás tome medicamentos para tratar el asma, pero aun así tiene dificultades para respirar o sufre de ataques que rápidamente se convierten en emergencias médicas. Una vez que las escuelas vuelvan a abrir y su hijo esté expuesto a más alergenos y virus, sus ataques pueden aumentar, poniéndolo en riesgo de perder días de clase y retrasarse.

Como sabe, los signos y los síntomas que puede manifestar un niño cuya asma no está bien controlada incluyen los siguientes:

• Sibilancia o tos (especialmente por la noche)
• Falta de aire
• Tensión, dolor o presión en el pecho

La buena noticia es que hay estudios de investigación locales evaluando medicamentos para el asma, así que si su hijo tiene asma, especialmente si no está bien controlada, puede ser elegible para inscribirse. Estos medicamentos en investigación no están disponibles a través del médico habitual de su hijo, pero tenga la seguridad de que puede seguir consultando al médico tratante. De hecho, puede considerar a los médicos del estudio como expertos en asma adicionales que vigilarán de cerca la salud de su hijo durante el estudio.

Dé el siguiente paso para comprobar si reúne los requisitos para participar en los estudios de investigación locales para niños que tienen Asma. No se demore, el cupo es limitado.